Y llegó la hora ....

Como dicen por ahí, no hay plazo que no se cumpla, ni deuda que no se pague; a menos de un mes del estreno del Episodio III de la Guerra de las Galaxias, todo parece dispuesto para que se cierre el círculo que comenzó hace 28 años, el 25 de Mayo de 1977, cuando George Lucas nos asombró con el episodio IV de la Guerra de las Galaxias “Una nueva esperanza”, aquella película que cambiaría todo el concepto de la ciencia ficción.

Pero ... dije “nos asombró” ? ... mentira, ni siquiera la vi, tenía 6 años por aquel entonces, no recuerdo más que los anuncios en revistas y paredes; ni siquiera tengo recuerdos del episodio V, pero sí recuerdo con nostalgia aquel año 1983, cuando junto con el “Lubi” y Esteban, amigos del vecindario, fuimos al cine a ver el episodio VI "El Regreso del Jedi", fue realmente con esta tercera entrega que me metí de lleno en el mundo de Star Wars. Recuerdo que con Juan Francisco (“Buche”) simulábamos peleas de espadas laser con palos de coligue y realizábamos verdaderos duelos, donde cada ataque de nuestras espadas estaba previamente ensayado y por supuesto nos jurábamos Darth Vader y Luke Skywalker.

Bueno, pero el tiempo pasa y lamentablemente tenemos que crecer, sin embargo nadie nos puede quitar ese sentimiento de nostalgia de ser niños, cuando soñabamos con nuestros heroes de otra galaxia. Pronto veremos, por fin, como Anakin Skywalker muere y como Dart Vader nace a la vida.

“La República” se ha terminado, se vienen tiempos oscuros... solo queda esperar una nueva esperanza...

Made the Force be with you ... always.

Mi Primer post... ¿Cómo se llamará? ... Ah !!!! Crisis existencial

Estudie Análisis de Sistemas y actuamente me desempeño en una empresa de desarrollo y explotación de software... pero adivinen ... no soy feliz en mi trabajo. Pertenezco a ese grupo de jovenes de la generación de los 80's en donde la novedad era la era informática... se escuchaban frases como "estudia computación, es la carrera del futuro !!!!". Ciertamente que lo era, el tiempo lo ha demostrado. Hace tres años, en el 2002, me vino el primer bajón, y descubrí que no quiero llegar a los 40 metido en un escritorio frente a una pantalla; la frialdad del mundo en que me desenvuelvo es a veces angustiante y solo el hecho de tener a mi familia me ha ayudado para no caer más de una vez en la enfermedad de moda de nuestra sociedad, el estrés laboral. Digo más de una vez porque en Abril del año pasado me pilló la máquina y me dio estrés; Gracias a Dios fue suave y pude salir rápidamente.

Fue despúes de ese primer bajón del 2002 cuando en una conversación con mi jefe, sobre el futuro que nos deparaba a ambos en la empresa, donde hice ¡ CLICK !. El , a unos cuantos años de jubilar, me pregunta mi edad, le contesto: 31 años; confieso que lo que me dijo a continuación me dejó congelado: "... a no po' jefe, usted ya esta cagado, e esta edad ya no encuentra trabajo en ninguna parte, tiene que morir aqui no más...". Esa frase se me quedó grabada y sería, como dije anteriormente, el primer hecho, de una serie que vendrían posteriormente, que me ayudó a tener más esperanza.

En esa misma época me tocó realizar una capacitación en una empresa gubernamental, y para no extenderme más, me encantó la labor de enseñar, recibí muchas alabanzas y felicitaciones por mi desempeño; fue en ese momento (bueno, no tan rápidamente, como comprenderán fue un proceso) que decidí que quería ser PROFESOR. Los acontecimientos me lo decían.. y no me lo van a creer pero había un detalle más que estuvo toda la vida frente a mis narices y nunca supe ver ... crecí con una mamá profesora (me hizo clases), mi hermana acaba de titularse de profesora de educación general básica, y la guinda de la torta ... mi esposa es educadora de párvulos.

Lamentablemente, por mi trabajo, ni siquiera podía estudiar en vespertino, pues generalmente mis horarios se extienden más alla de la jornada normal ... pero, Dios me tenía una sorpresa, una amiga me contó que podía estudiar Pedagogía en Religión para la enseñanza básica , en un programa especial intensivo solo los días sábados... y aquí me tienen, en el tercer año de la carrera ... feliz, entusiasmado, amando lo que hago. Todavía me quedan como tres años, no se si podré terminar, no se como haré cuando tenga que realizar prácticas ... me abandono en las manos de Dios y que se cumpla en mi su voluntad.
Gracias a mi jefe "Don Danilo", por el primer impulso (involuntario ???) de sus palabras, gracias a mi esposa que me apoya incondicionalmente y por supuesto... Gracias Dios.